Una llamada urgente nos hizo llegar a Carmen de la Legua, era la señora Jackeline Linda Tapia Flores. Ella es una humilde mujer que laboraba en un quiosco de venta de diarios y revistas, pero como señala de un momento a otro la erradicaron del lugar donde estuvo por años. Ella logró tenere un quiosco gracias a una empresa que se lo regaló, porque tiene un hijo con discapacidad y está inscrito en la Oficina Municipal de Atención a la Persona con Discapacidad (OMAPED) y en el Consejo Nacional para la Integración de las Personas con Discapacidad (CONADIS).
«Yo tenia mi quiosco ubicado en parque Moisés Woll y el señor Sub gerente de Control y Sanción, Sr. Jimmy Niquen Castillo reubicó mi quiosco hacia la Av. Elmer Faucett con Conquistadores. Trabajé cuatro días, pero como vinieron personas que me pedían cupo. De lo que yo vendía tenía que pagar, entonces dejé de trabajar ahí», señala indignada Tapia Flores, quien por seguridad tuvo que volver a vender fuera de su quiosco por el lugar de donde la sacaron.
Ella agrega «Me puse a trabajar en el punto donde antes vendía en el parque Moises Woll, entonces de la noche a la mañana me tocan mi puerta y me dicen señora su quiosco ya no está, vaya a ver… entonces yo me fui a mi quiosco donde me reubicaron en Elmer Faucett cuadra siete por la línea del tren y mi quiosco ya no estaba. Me acerqué a la caseta de serenazgo y me dijeron: señora nosotros no sabemos donde está su quiosco».
Muy preocupada la señora quien pertenece a la Federación Nacional de Vendedores de Diarios, Revistas y Loterías del Perú (FENVENDRELP), nos indica «No me notificaron nada donde podía estar y hasta ahora no aparece mi quiosco, ellos dicen que la empresa se lo llevó. Pero yo he llamado a la empresa y me dicen «no sabemos», entonces se lavan las manos mutuamente los dos ¿A quién voy a recurrir?»
La historia de cómo obtuvo el permiso y el quiosco para trabajar ella nos lo cuenta «Con el alcalde anterior (Daniel Lecca) nunca tuve problemas, yo trabajaba con la carretita antigua de cuatro ruedas, pero cuando entró el alcalde el actual (Raúl Odar), él me dijo: señora tiene que cambiar de carreta porque da mal aspecto en la avenida, tiene que presentarse bien un quiosco porque estamos en la via céntrica del aeropuerto. Tiene que dar buena imagen, es por eso que busqué y conseguí que me dieran el quiosco. Yo le dije señor alcalde ya tengo este quiosco inteligente y él me dijo: está bien y me dio el permiso entonces lo puse y lo inaguramos».
Al preguntarle por los documentos que respaldan lo que nos cuenta, ella afirma, «Los documentos que tengo son la Resolución otorgada por el alcalde Lecca, que vencía el 5 de abril del 2015. Con ese documento le presenté un documento de mi hijo del CONADIS. Mi hijo el mayor ahorita tiene 12 años. Después yo presenté el 20 de marzo del 2015, mi resolución para que me renueven y no me respondieron hasta que me notificaron de la municipalidad con fecha del 10 de agosto del 2015».